Cláusula Suelo: Cómo declarar a Hacienda lo recuperado
Tras un procedimiento largo y tedioso son muchos los usuarios que reclaman y finalmente recuperan su dinero de la cláusula suelo; sin embargo, al llegar la declaración de la Renta vuelven los sudores fríos: ¿tenemos que pagar a Hacienda lo que hemos recuperado en la clausula suelo?
¿Tienes alguna tarjeta revolving, préstamo o microcrédito?
Te ayudaremos a descubrir si puedes hacer una denuncia y recuperar el dinero que has invertido en intereses abusivos.
La devolución de la cláusula suelo no tributa
Por lo general, el dinero devuelto por los intereses extras pagados con la aplicación de la cláusula suelo no deben declararse; así lo indica Agencia Tributaria. Por su parte, sabemos que este derecho aplica tanto en la devolución del dinero por un acuerdo de las partes como en la devolución derivada de una sentencia judicial.
Sin embargo, hay excepciones a esto, así que mejor sigue leyendo.
¿Deben declararse los intereses indemnizatorios?
Al igual que la devolución de la cláusula suelo, los pagos por indemnización que recibas por un abuso bancario tampoco deben declararse. Pero estamos hablando de indemnizaciones y no de los gastos del proceso judicial, por lo que, si se condenó a la entidad a pagarlos, sí deberás declararlos como ganancia patrimonial de la base imponible general.
Dicha ganancia patrimonial se declara rellenando las casillas 524 y 526, pero no la 527 y 528, además de marcar las casillas 453 y 454.
¿Cuándo pagar impuestos por la cláusula suelo?
Aunque la regla general es que no deberás pagar impuestos por lo devuelto de la cláusula suelo, hay excepciones a ella. Particularmente, hablamos de dos casos:
- Cuando el pago de la hipoteca se dedujo en la declaración, bien por inversión en vivienda habitual o como gasto deducible por una actividad económica.
- Cuando la compensación por el interés extra se recibió en efectivo.
En ambos casos, debes tributar por el dinero recibido con una declaración complementaria por cada ejercicio afectado quitando dichos gastos. Además, es necesario aclarar que las irregularidades fiscales prescriben a los cuatro años, por lo que no deberás hacer declaraciones complementarias por deducciones anteriores.
¿La cláusula suelo es un gasto deducible?
Debido a que muchas personas se aprovecharon de la deducción por vivienda habitual y lo aplicaron sobre lo que pagaron por la cláusula suelo, ya no tienen derecho a una desgravación de este capital. Será necesario hacer la suma de las cantidades deducidas incorrectamente en anteriores declaraciones.
Lo bueno es que no se aplicarán intereses a dicha demora, ya que se considera una regularización de ingresos. En la declaración deberás rellenar las casillas 0539 y 0544, así como marcar las casillas 0540 y 0545.
Amortizar capital para reducir impuestos
Para evitar las situaciones presentadas podrías, en lugar de recibir el dinero por parte de tu entidad bancaria, amortizar parte del préstamo con dicha compensación; allí no deberás pagar por las deducciones anteriores. Como ventaja, estarás algún tiempo pagando menores intereses y será menos complicado hacer tu Declaración de la Renta.
Sin embargo, si solo se destina una parte de la compensación para amortizar y se recibe la otra en efectivo, sí deberás devolver la deducción de la parte correspondiente; por eso lo mejor sería dejar que la deuda de la entidad se vaya descontando de tus próximas cuotas.
Por otro lado, debes saber que el límite máximo de base de una reducción por vivienda habitual es de 9.040€ y es necesario comprobar si existió ese límite en los ejercicios donde se aplicó la deducción. Si el suelo te redujo una cifra superior a esta, deberás pagar la diferencia; en caso contrario, puedes cobrar el resto de tu dinero sin tributar.
Como verás, solo deberás declarar la devolución de tu dinero si anteriormente has utilizado dicho interés para reducir tus impuestos, o si estás recibiendo algún pago en efectivo por indemnización. En la mayoría de los casos podrás recibir tu dinero intacto. Lo mejor es que hagas tus cálculos sobre lo que debes pagar o no, y determines cómo te conviene aprovechar esta devolución.