Los mejores fondos indexados: ¿Gestión activa o gestión pasiva?

Los fondos indexados se han popularizado entre los inversores que quieren obtener una rentabilidad atractiva a largo plazo. Si bien es cierto que su rentabilidad está expuesta al ciclo económico y al rendimiento de los índices bursátiles, son una opción cada vez más habitual. ¿Cuáles son los mejores fondos indexados? ¿Cómo puedes invertir en ellos? ¿Cómo crear una cartera en función de tu perfil como inversor?

[TABLA RESUMEN] Los fondos indexados con mayor rentabilidad en lo que va del 2025

¿Qué son los fondos indexados?

Los fondos indexados son vehículos de inversión que replican el comportamiento de un índice bursátil específico, como el S&P 500, el Ibex 35 o el Nasdaq 100. A diferencia de los fondos de inversión tradicionales, no están gestionados por un equipo de profesionales de forma activa. Por lo tanto, su meta no es superar al mercado, sino igualar el rendimiento de su benchmark o índice de referencia.

Como no tienen un equipo de gestores detrás, sus comisiones son más bajas que en un fondo de inversión activa. También es más fácil saber en qué activos se está invirtiendo.

Los mejores fondos indexados en 2025

Para determinar cuáles son los mejores fondos indexados, vamos a repasar cuáles han sido los más rentables en función de su región, el índice que replica o el tipo de activo.

Fondos indexados más rentables de renta variable global

Por norma general, los fondos de renta variable replican al MSCI World, el fondo que aglutina a las principales empresas a nivel mundial. Por lo tanto, es un índice que soporta mejor la volatilidad, ya que tiene presencia de las grandes regiones económicas de todo el mundo. Ofrecen la posibilidad de invertir en las mejores empresas del mundo sin exposición a un sector determinado.

Estos productos acumulan una rentabilidad anualizada a tres años por encima del doble dígito. Si ampliamos el espectro a cinco años, su revalorización ronda el 13%. Los más populares son el iShares Developed World Index Fund D Acc, el Fidelity MSCI World Index Fund P-ACC-EUR, el Vanguard Global Stock Index, Fund EUR Acc o el Amundi Index MSCI World – IE (C).

Fondos indexados al S&P 500

El S&P 500 es el índice director del mercado. Se conoce así porque agrupa a las 500 compañías más importantes de Wall Street. Por lo tanto, representa de manera fidedigna a todos los sectores de la economía estadounidense, la más importante del mundo.

Históricamente el índice acumula una rentabilidad anualizada superior al 6% desde que se creó en 1923, aunque entonces ‘solo’ cubría 233 compañías. Es decir, si nos atenemos a la trayectoria, representa un crecimiento sostenido a tener en cuenta para los inversores.

Los más conocidos son el Fidelity S&P 500 Index Fund P-ACC-EUR, el Vanguard U.S. 500 Stock Index Fund, el MyInvestor S&P500 Equiponderado y el Pictet-USA Index-P EUR.

Fondos indexados a Europa

Europa lleva tiempo bajo el radar de los inversores. En contextos de alta volatilidad, la vieja Europa, donde sectores más defensivos tienen más peso, es un refugio donde aguardar mientras la tormenta pasa. El índice más replicado en la región es el Euro Stoxx 50, que incluye a las empresas cotizadas más grandes del continente.

Entre los más habituales en las carteras de los inversores están el Vanguard European Stock Index Fund, el iShares Europe Index Fund D Acc, el Fidelity MSCI Europe Index Fund P-ACC-EUR, el Amundi Index MSCI Europe – IE (C) y el Pictet-Europe Index-P EUR.

Dentro de las bolsas europeas, el Ibex 35 español viene siendo una de los índices más rentables. Aunque, evidentemente, hay menos variedad, también existen productos que replican el comportamiento del selectivo español. Es el caso del Bindex España Índice FI, el Caixabank Bolsa Índice España FI, el ING Direct Fondo Naranja Ibex 35 FI, el Santander Índice España FI y el BBVA Bolsa Índice FI, entre otros.

¿Cómo puedo invertir en fondos indexados?

Como hemos explicado a lo largo del artículo, invertir en fondos indexados es relativamente sencillo y accesible para cualquier inversor.

El primer paso es escoger una plataforma, gestora o entidad bancaria. Acudir al distribuidor del fondo, en definitiva. Una de las alternativas más comunes es decantarse por realizar la inversión a través de robo advisors. Se trata de gestores de inversiones automatizados que ofrecen asesoramiento mediante algoritmos. El objetivo es reducir al mínimo los costes y facilitar el acceso a inversiones diversificadas y adaptadas al cliente sin que tenga que intermediar un gestor o asesor financiero.

La propia plataforma esboza tu perfil de inversor a través de preguntas personales, de ingresos, objetivos, tolerancia al riesgo u horizonte temporal. En función de las respuestas, te asigna una cartera. El robo advisor será el encargado de equilibrar la cartera, reinvertir los dividendos, ajustar el riesgo y minimizar los costes fiscales.

El segundo paso es definir tu perfil de inversor. Aunque un robo advisor puede hacerlo por ti, lo ideal es que sepas qué nivel de exposición al riesgo estás dispuesto a asumir. Establece tu horizonte temporal y objetivos financieros. Es importante que sepas que los fondos indexados, salvo contadas excepciones, no son los instrumentos de inversión adecuados si buscas grandes rentabilidades en cortos periodos de tiempo.  Por norma general, son productos para inversores que piensan en el largo plazo.

A continuación, selecciona el índice que quieres replicar. Lo más común es decantarse por índices de gran tamaño, como el MSCI World o el S&P 500, para estar más diversificados por áreas geográficas o sectores. Sin embargo, según el momento del mercado, optar por índices regionales como el Euro Stoxx 50 o sectoriales, como el SOX (de semiconductores), puede ser una alternativa interesante.

Una vez se ha cumplido con lo anterior, toca elegir el fondo específico. Hay que prestar atención a la comisión de gestión, la rentabilidad histórica, el tamaño del fondo o la política de distribución de dividendos. Es decir, si se reinvierten o se reparten.

Ha llegado el momento, puedes realizar tu primera inversión. La clave aquí está en decidir si la inversión va a constar de un importe inicial y aportaciones periódicas a configurar o, por el contrario, una aportación única.

Con las cartas sobre la mesa, solo queda esperar a que el mercado evolucione. Evita reaccionar ante movimientos del mercado en el corto plazo y deja que el interés compuesto haga su trabajo.

¿Qué es la gestión pasiva?

La gestión pasiva es una estrategia de inversión que se basa en mantener una cartera estable y diversificada a lo largo del tiempo. No se hacen cambios en la ponderación de los activos que componen la cartera. La gestión pasiva se enfoca en imitar el comportamiento del mercado con el menor coste posible. Es decir, se da por supuesto que el índice de referencia tendrá un comportamiento lo suficientemente bueno en el largo plazo como para resultar rentable.

Menos costes, más riesgos

Los fondos indexados se focalizan en la reducción de costes, aunque están más expuestos ante las caídas puntuales de su índice de referencia.

Aunque esta forma de invertir es más frágil ante las turbulencias del mercado, se antepone la reducción de costes operativos. Además, se evita que la interacción de gestores pueda llevar a errores de interpretación que afecten a la rentabilidad del fondo.

Diferencias entre un ETF y un fondo indexado

Aunque es un error habitual, porque son productos con características similares, un ETF no es un fondo indexado. Un fondo cotizado en bolsa (ETF por sus siglas en inglés) es un tipo de fondo de inversión que replica un índice, una materia prima o un sector, y que se compra y vende como si fuera una acción más dentro de un mercado de valores. Es un híbrido entre un fondo y una acción que combina las ventajas del primero y la flexibilidad del trading.

Los ETF generalmente tienen comisiones más bajas que los fondos de gestión activa y se puede invertir en ellos a través de brokers como eToro, inbestMe, Trade Republic, Lightyear o MyInvestor, entre otros.

¿Cómo elegir los mejores fondos indexados?

Una vez decidido en qué mercado te gustaría tomar exposición, debes tener presente una serie de criterios para seleccionar los mejores fondos indexados:

• Prestigio y tamaño de la gestora: la experiencia e infraestructura de la gestora juegan un papel importante en la calidad de sus fondos. Anteriormente hemos tratado algunas de las mejores gestoras de fondos indexados.
• Patrimonio del fondo: es recomendable escoger fondos de gestión pasiva con grandes patrimonios para no tener problemas de liquidez ante una situación adversa en el mercado, cuando muchos partícipes suelen reembolsar sus participaciones. También es un elemento que puede influir en las comisiones.
• Tracking error: hace referencia a la desviación máxima del fondo con respecto a su índice de referencia. Cuanto menor sea, el fondo se comporta de un modo más fiel.
• Comisiones: naturalmente, es un factor a tener presente en toda inversión financiera, puesto que índice directamente en los rendimientos obtenidos. No obstante, debe valorarse en conjunto con el resto de factores que definen la calidad de un producto financiero.

¿Son seguros los fondos indexados?

Más allá de ofrecer liquidez, diversificación y gestión profesional, los fondos de inversión son uno de los productos financieros más transparentes y seguros en cuanto al dinero depositado.

Las sociedades gestoras, depositarios, agentes distribuidores y los propios fondos se encuentran regulados por las autoridades financieras competentes. Nos referimos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en España. La información que recibe el partícipe (documento de datos fundamentales para el inversor) debe ser aprobada por este organismo y figura en sus registros.

En caso de que se produzca una quiebra de la entidad gestora, los fondos que tiene bajo gestión no se ven afectados debido a que no forman parte de su patrimonio. Además, en caso de suspender los pagos, el dinero de los clientes se encuentra garantizado por el Fondo de Garantía de Inversiones (FOGAIN) o fondo similar en caso de gestoras extranjeras autorizadas para operar en España.

¿Es un buen momento para comprar fondos indexados?

Si quieres comprar un fondo de índice bursátil o casi cualquier fondo de acciones ampliamente diversificado como el S&P 500, sí puede ser un buen momento para invertir en él si estás pensando en mantenerlo a largo plazo. Esto se debe a que el mercado tiende a subir con el tiempo, a medida que la economía crece y las ganancias corporativas aumentan.

En este sentido, el tiempo juega a tu favor, porque te permite capitalizar tu dinero, permitiendo que generes aún más dinero. Por tanto, es fundamental que los inversores adopten un enfoque paciente en este tipo de inversiones en fondos indexados, de manera que puedan superar cualquier volatilidad a corto plazo.

Conclusión sobre los fondos indexados más rentables

Los fondos indexados son sólo un tipo de fondos de inversión, por sí mismos no son buenos ni malos; depende de los objetivos, estrategia y necesidades de cada inversor.

Se han vuelto populares entre los inversores, especialmente los principiantes, porque prometen poseer una amplia variedad de acciones, mayor diversificación y menor riesgo, generalmente todo a un bajo coste, a través de plataformas sencillas de usar como los robo advisors.

Además de su utilidad, algunas de las preguntas más frecuentes que suelen surgir con respecto a los productos de gestión pasiva suelen estar relacionadas con la seguridad en la inversión y los criterios para seleccionarlos.