¿Por qué BBVA y Banco Sabadell no han llegado a acuerdo de fusión?

El pasado 16 de noviembre de 2020 sonaron campanas de boda entre BBVA y Banco Sabadell, donde se auguraba la creación del que iba a ser el banco más grande de España con más 950.000 millones de activos.

Aunque desde un principio ambos bancos pedían calma y dejaban claro que el enlace no estaba aún firmado, ya se presumía un gran futuro para esta nueva nueva fusión bancaria que hubiera superado en tamaño a la reciente unión de CaixaBank y Bankia.

Se cancela la fusión entre BBVA y Banco Sabadell

La propia Comisión Nacional del Mercado de Valores es quien anuncia en la mañana del 27 de noviembre que esta fusión, finalmente, no se llevará a cabo, remitiéndose a un comunicado de la entidad catalana y la entidad vasca.

Las razones del desistimiento, según confirman tanto BBVA como Banco Sabadell en sus declaraciones, ha sido la falta de consenso entre ambas para llegar a un punto de acuerdo respecto a la futura organización de la nueva entidad.

No han sido todo discrepancias y es que, en los primeros anuncios de su fusión, las dos entidades ya habían prácticamente confirmado los puestos de administración ejecutiva: Carlos Torres, actual presidente de BBVA y futuro de la que sería la nueva entidad, y Josep Oliu, presidente del Sabadell en el puesto de vicepresidente.

Y es que, si algo ha dejado entrever la suspensión del acuerdo, es que realmente se trataba de una absorción, ya que entre BBVA y Banco Sabadell hay una gran diferencia de tamaño y tampoco podía hablarse de igualdad de condiciones.

Lo bueno y lo malo de la posible fusión

No deja de ser cierto que el proceso de unión señalaba beneficios en ambos casos. Según los expertos, el ahorro anual hubiera podido alcanzar los 700 millones de euros y junto a ello, ambos bancos disfrutaron de una subida en bolsa de un 19%, para BBVA y un 32% para el Banco Sabadell durante el proceso de negociación.

Tanto la entidad catalana como la entidad vasca procuran mantenerse discretos sobre las auténticas razones del desenlace; sin embargo, distintos medios de comunicación han señalado que la diferencia situacional en la que se ubica cada entidad, provoca una fuerte desconfianza a ambas.

Recordemos que la negociación de BBVA partía de realizar el pago mediante un intercambio de acciones y, es en este sentido donde muchas fuentes señalan como el Sabadell ha mostrado reticencias a la aceptación de sus propuestas.

En cualquier caso, ambas entidades dicen sentirse cómodas con el final del proceso y sus resultados, subiendo su cotización en bolsa a un 2% en el caso de BBVA, mientras el banco catalán dice centrarse más que nunca en las pymes y su rentabilidad.

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