JP Morgan dispara el precio potencial de Bitcoin

El bitcoin sigue rozando el máximo histórico, tanteando los 50.000 euros. En lo que va de año el Bitcoin ya se ha revalorizado un 100%, pero eso no quiere decir que sea el final de la criptomoneda ya que los analistas de inversión aún ven posibilidades de mayores subidas si se dan las condiciones necesarias.

JP Morgan, una de las mayores instituciones financieras de los Estados Unidos, en una nota a sus inversores ha indicado que según sus análisis, la criptomoneda podría llegar a alcanzar los 130.000 dólares (unos 110.000 euros) en el largo plazo si su volatilidad sigue disminuyendo.

Los analistas del banco consideran que la alta volatilidad que ha caracterizado a Bitcoin desde el principio, y más desde que es considerado un activo de inversión (o especulación en algunos casos) supone un gran freno para la adopción institucional, es decir, los grandes fondos de inversión, compañías de seguros o empresas multinacionales. Si la volatilidad se reduce, la criptomoneda podría sufrir un empujón definitivo como activo imprescindible en las carteras de los grandes inversores institucionales, y como tal, su precio no haría más que subir.

Un problema de volatilidad

En los últimos meses parece que esa volatilidad ha encontrado algo de calma. Según JPMorgan esta normalización de la volatilidad de bitcoin es “alentadora”, y es un aspecto clave, una señal, para que los institucionales, incluidos los bancos, comiencen a mirar de nuevo hacia esta criptomoneda

El equipo de análisis del banco de inversión estadounidense afirma que la volatilidad de los últimos tres meses para la criptomoneda ha caído al 86% después de haberse establecido por encima del 90% en febrero. Bajo estas métricas, la medición de los últimos seis meses parece estabilizarse en torno al 73%.

Grandes instituciones han ido incorporándose al mundo bitcoin, como los bancos americanos Goldman Sachs o Morgan Stanley, que ya han empezado a ofrecer productos y servicios relacionados con bitcoin para sus clientes. También empresas como Square, PayPal o Tesla ya son parte del movimiento Bitcoin, a través de sus productos, de facilitar su compra, aceptar estos como moneda o simplemente como activo de reserva para su tesorería.

Si esta volatilidad continúa este camino descendente, JPMorgan adelanta que las potenciales entradas de capital pueden ser de un tamaño nunca visto. Y que su precio podría llegar a alcanzar entre los 130.000 y los 470.000 dólares para finales de este año. 

La firma de inversión ARK Invest, fundada y dirigida por Catherine Wood, también comparte la visión de JPMorgan, afirmando que Bitcoin podría incluso alcanzar los 500.000 dólares por unidad a medio plazo. 

¿El oro 2.0?

Los analistas de JPMorgan también consideran que Bitcoin puede llegar a desplazar al oro como activo de reserva de valor, según estos, el bitcoin es incluso más atractivo que el oro desde un punto de vista de diversificación y descorrelación con el mercado tradicional de acciones y bonos, lo que le convierte en un activo muy atractivo para minimizar los riesgos de las carteras de los fondos de inversión.

En los últimos dos trimestres JPMorgan afirma que los casi 7 billones de dólares (7000 millones) que han fluido hacia compras de Bitcoin han venido a base de quitar cuota de mercado al oro, es decir, reduciendo su capitalización, que ha visto como salían más de 20 billones (20000 millones) de dólares de ETF’s (Exchange traded funds – fondos de inversión cotizados en bolsa) que replican el comportamiento del metal precioso.

El rendimiento de los últimos meses de Bitcoin frente al oro ha captado la atención de muchos inversores, que se apresuraron a invertir en la criptomoneda, atrayendo a un gran número de inversores institucionales hacia el ecosistema. En su informe, JPMorgan afirma que existe una mayor afluencia de inversores en Grayscale, uno de los gestores de fondos con posiciones en Bitcoin más conocidos del mundo, por lo que sus tenencias de Bitcoins en el vehículo de inversión esta compañía se han disparado. 

El interés de los inversores institucionales por Bitcoin, durante el pasado año fue enorme, representando a la criptomoneda como una mejor alternativa frente al oro. 

Michael Sonnenshein, director general de la gestora de fondos Grayscale ha afirmado que:

“Algunos inversores que anteriormente invirtieron en ETF de oro, pueden estar considerando bitcoin como una alternativa a éste”.

De esta forma, sus propiedades y características han llevado a muchos expertos a considerar al Bitcoin como el nuevo oro digital o el oro 2.0. Ahora que la volatilidad de esta criptomoneda ha comenzado a disminuir de forma considerable, los analistas de JPMorgan aseguran que el Bitcoin comenzará a atraer a un número mayor de inversionistas institucionales, que se han mantenido alejados de la inversión en esta criptomoneda debido a la inestabilidad de los precios en el mercado.

7 billones de dólares en Bitcoins

El análisis de JPMorgan señala que el Grayscale Bitcoin Trust (El fondo insignia de Greyscale) ya gestiona activos por una cantidad superior a los 7,6 billones de dólares (7600 millones), mientras que en el resto de sus productos que invierten en otras criptomonedas (como Ethereum) apenas suponen 1,5 billones, es decir, el Greyscale Bitcoin Trust, representa más del 80% del total de inversiones de la gestora. Para hacernos una idea del tamaño de este fondo, actualmente y desde el tercer halving de bitcoin (un evento cada varios años en el que, según el protocolo de Bitcoin, la cantidad de Bitcoins que se emiten se reduce a la mitad), se minan cerca de 1.000 bitcoins nuevos por día, y que Grayscale compra 900 de estos, casi la totalidad de los nuevos bitcoins que se generan diariamente.

El potencial a largo plazo de Bitcoin

Por último, el banco estadounidense señaló que la posibilidad de que Bitcoin mantenga esa tendencia positiva a largo plazo dependerá de varios factores, entre ellos su regulación, su seguridad, su volatilidad o su adopción.

Pueden surgir factores determinantes para que este valor no se aprecie en el futuro o que lo haga de una manera más rápida. Entre algunos factores que harían posible que Bitcoin continuase ganando valor, dos de los principales son la adopción continuada de bitcoin por la generación Millenial, mucho más proclive a utilizar ese “oro 2.0 u oro digital” y que los inversores sitúen al bitcoin como una mejor alternativa que el oro como depósito de valor o activo refugio.

Para que el valor teórico que JPMorgan le da a una unidad de bitcoin, de más de 130.000 dólares, la capitalización de mercado de Bitcoin, que es la multiplicación del número de monedas en circulación por el precio de una unidad, y que se sitúa actualmente en casi 600 billones d dólares (unos 500 mil millones de euros) debería multiplicarse por más de 4.5 veces, hasta alcanzar los 2.7 trillones de dólares (2.7 billones europeos), lo que equivaldría a las reservas privadas de oro mundial.

Aun así, JPMorgan advierte que los actuales niveles de compra, muchas veces especulativa, pueden no ser sostenibles a corto plazo y que la volatilidad seguirá siendo alta, varias veces superior a la del oro, pero si hay algún activo con la posibilidad (aún lejana) de hacer frente al oro, el metal precioso más valorado del mundo desde hace siglos, ése es el bitcoin.

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