¿Cómo empezar a invertir con tan solo 1€?

Miedo-a-invertir

El micro-investing nos permite comenzar a invertir desde cantidades minúsculas

¿Siempre has querido invertir pero no sabias por dónde empezar? ¿Crees que invertir es demasiado complicado o arriesgado? ¿Piensas que la inversión es solo para los ricos?

La micro inversión puede ser la solución a todas estas preguntas. Hoy en día la inversión se ha democratizado y es posible invertir desde casi cualquier cantidad, por ejemplo tan solo 1€. La micro inversión (micro-investing) nos permite comenzar a rentabilizar nuestros ahorros fácilmente desde cantidades muy pequeñas, obteniendo intereses y rentabilidades que se beneficiaran de la magia del interés compuesto a lo largo del tiempo.

Y es que cuando hablamos de pequeñas cantidades de dinero no estamos exagerando. La micro inversión nos permite comenzar a invertir desde tan solo 1,50 euros, 75 céntimos o incluso 25 céntimos.

El paso del tiempo juega a nuestro favor en los mercados financieros, y según vayamos acumulando ganancias con poco esfuerzo, veras como aumenta tu motivación para aprender más, invertir más y alcanzar tus objetivos financieros. Todo empieza con una primera inversión por pequeña que sea.

¿Cómo empezar a invertir con poco dinero?

La micro inversión se realiza principalmente a través de una aplicación. Tendrás que investigar un poco para encontrar la más adecuada para ti, dependiendo de aspectos como el coste por operación, la facilidad de uso y la disponibilidad de alternativas de inversión.

Seguramente verás varias menciones a los grandes nombres de la micro inversión como Acorns y Stash, pero dales también una oportunidad a las aplicaciones más nuevas, algunas con origen en nuestro país como Coinscrap, Goin o Jido.

Aunque tienes varias opciones, estructuralmente estas aplicaciones son todas similares. Su funcionalidad principal es ser una plataforma que nos ayude a ahorrar (a través de fórmulas como el redondeo de los gastos) y a invertir este ahorro.

Creando una cuenta de micro inversión

Una vez que hayamos elegido una aplicación, deberemos crear una cuenta y vincularla a nuestro banco. Deberemos hacer esto para utilizar la aplicación ya que las transferencias bancarias directas son la forma de ingresar dinero en estas aplicaciones.

Si esto te da algo de inseguridad, tómate un tiempo extra para revisar la empresa que hay detrás de la aplicación y su regulación. Aprendiendo sobre su seguridad nos dará la confianza necesaria para dormir más tranquilos.

Dado que la aplicación tendrá que verificar toda nuestra documentación (documento de identidad con fotografía, dirección personal, etc.), pueden pasar varios días laborables antes de que nuestra cuenta esté 100% activa.

Creando un perfil de inversor

Una vez configurada nuestra cuenta, crearemos un perfil de inversor. Se nos abrirá un test con una serie de preguntas, destinadas a determinar nuestra tolerancia al riesgo para elegir nuestra cartera de inversiones.

¿Estamos dispuestos a invertir en activos muy volátiles para tener la posibilidad de obtener rentabilidades cercanas al 10%? ¿O preferimos invertir en activos más estables para obtener rentabilidades más fiables aunque en el entorno del 4%?

Tal vez, como la mayoría de la gente, nos encontremos en un punto intermedio. Según nuestra escala de tolerancia al riesgo personalizada podremos aclarar nuestra posición en la escala de la aplicación. Las aplicaciones suelen ofrecer categorías de riesgo como: muy bajo, moderadamente bajo, moderado, moderadamente agresivo y agresivo. Sólo tendremos que señalar en qué lugar de la escala nos encontramos más cómodos.

¿En qué invertir con poco dinero?

La mayoría de las plataformas de micro inversión invierten nuestro dinero en fondos cotizados o ETF. ¿No estás familiarizado con los ETFs?

Un ETF es un fondo cotizado compuesto por múltiples activos diferentes. Es una herramienta muy diversificada, que contiene acciones, bonos u otros activos de inversión de diferentes tamaños, sectores o países.  Comprar una participación de un ETF es exactamente igual que invertir en un fondo de inversión, donde muchas personas agrupan su dinero para invertir de forma conjunta (a través de una gestora) reduciendo costes y facilitando acceder a una cartera diversa desde el primer momento.

Los ETF son como los fondos de inversión pero están cotizados en bolsa, con lo que podemos comprarlos y venderlos en cualquier momento como si se tratase de una acción de una empresa. Eso nos facilita invertir en estos instrumentos diversificados desde tan solo 1 participación, que en muchos casos es testimonial, con precios de 10, 20 o 50€.

Cuando somos participes de un ETF, las acciones, bonos u otros activos que lo componen son los que determinan el rendimiento del ETF. Cuando el ETF gana dinero, nosotros ganaremos dinero en proporción al tamaño de nuestra inversión.

Por supuesto, nuestro perfil de riesgo dicta el tipo de ETF en el que vamos a invertir. Si somos capaz de tolerar el riesgo, nuestro dinero debería ir a un ETF que incluya un peso alto de renta variable (acciones). Si por el contrario, somos más conservadores, nuestro dinero debería dirigirse a un ETF que contenga una proporción de renta fija (bonos) superior.

Hay un ETF para casi todos los estilos de inversión, por lo que podemos estar seguros de que encontraremos una opción adecuada para nuestro perfil, conocimientos e intereses.

¿Cómo empezar a micro invertir?

Hay dos formas principales para comenzar a invertir con poco dinero, por una parte la inversión directa y por otra el redondeo.

Inversión directa:

La inversión directa es aquella en la que somos nosotros quien hacemos las aportaciones al producto o productos que hemos elegido. Si tenemos ingresos poco estables o no sabemos cuánto vamos a poder ahorrar cada mes, podemos simplemente esperar hasta que llegue el momento y hacer una transferencia única a nuestra cuenta de inversión.

Para comprar un ETF necesitaremos el mínimo al que cotice su acción, que puede ir de menos de 10 euros hasta varios cientos. Por su parte si nos decidimos por invertir en fondos de inversión (ya sean indexados o de gestión activa) podremos hacernos participes desde apenas unos pocos euros (5-10 euros suele ser la cantidad más pequeña que puedes aportar).

Si por el contrario tienes unos ingresos más estables y quieres hacer aportaciones periódicas, puedes configurar tu cuenta para invertir según un calendario. Pueden ser 5 euros a la semana, 25 euros al mes o cualquier otra cantidad. Podremos aumentar o disminuir fácilmente las cantidades y la frecuencia en cualquier momento desde nuestra cuenta de inversión o banco. La mayor parte de las gestoras de fondos de inversión y plataforma de compra de fondos ofrecen este tipo de aportaciones periódicas. Si optamos por los ETF o las acciones deberemos programar un ingreso en nuestro bróker y gestionar las compras de forma manual.

Una muy buena idea es utilizar un porcentaje de nuestros ingresos cada mes para hacer compras periódicas del fondo o fondos que hayamos elegido, con ello no solo conseguiremos ahorrar de manera fácil y cómoda, sino que además nos aprovecharemos de la magia del DCA (Dollar Cost Averaging).

Redondeo:

Esta es una forma muy inteligente de convertirnos en inversores. Existen múltiples aplicaciones, ya sean independientes o de los bancos tradicionales que permiten configurar un redondeo de cada compra con nuestra tarjeta y cuenta bancaria. Si por ejemplo hacemos una compra de 3,70 euros, la aplicación lo redondeará al siguiente euro y transferirá 0,30 euros a una cuenta de inversión.

Esto lo hace para todos y cada una de las compras, lo que significa que podemos invertir desde unos pocos euros o hasta grandes cantidades, dependiendo de cuántos cargos pasen por tu cuenta bancaria.

Si te gusta el efecto que tienen los redondeos en tu cuenta (y te gustará, pues se acumulan rápidamente), también puedes conectar tus tarjetas de crédito y débito a la aplicación.

De este modo, cada transacción que realices formará parte de la máquina de «redondear e invertir». Además de los redondeos por compras hay otras muchas opciones para maximizar el ahorro, como gastos especiales, aportaciones extraordinarias cada trimestre, por cada cumpleaños o incluso dependiendo de la época del año, donde realizaremos una aportación más a nuestra cuenta de inversión.

La mayoría de las aplicaciones tienen una opción de «multiplicador» que podemos utilizar para sobredimensionar tus redondeos hasta la cantidad que prefiramos, por ejemplo haciendo un x2.

También podemos utilizar una combinación de financiación directa y redondeos. Mucha gente hace aportaciones regulares semanales o mensuales a su cuenta, además de mantener sus inversiones de redondeo. Este enfoque múltiple hace que nuestro ahorro crezca aún más rápido.

Un ejemplo de la micro inversión ¿De cuánto dinero estamos hablando?

Es importante mantener las expectativas bajo control. Después de todo, se llama «micro inversión» por una razón. No podemos esperar que las pequeñas inversiones nos den una gran ganancia en poco tiempo. Pero si podemos esperar ir generando un buen ahorro a largo plazo en el mercado y con las sucesivas aportaciones veremos como la bola de nieve de la inversión comienza a girar.

Veamos algunos ejemplos sencillos de micro inversión:

  • A: Utiliza los redondeos por una media de 15 euros al mes.
  • B: Utiliza los redondeos x2 por una media de 30 euros al mes.
  • C: Utiliza redondeos en su cuenta corriente y tarjetas de crédito por una media de 30 euros al mes y además también invierte 25 euros mensuales de forma directa para un total de 55 euros al mes.
  • D: Utiliza los redondeos por una media de 60 euros al mes e invierte 25 euros mensuales de forma directa para un total de 85 euros al mes.

Supongamos que todas las cuentas obtienen una rentabilidad media del 7% anual y se mantienen durante 10 años:

Aunque parezca que estas cantidades tras 10 años de inversión no van a cambiar tu vida, nada más lejos de la realidad. Estamos hablando de pequeñas cantidades que podemos ahorrar, casi sin esfuerzo, y que en la mayoría de casos habríamos gastado en cosas poco importantes.

Poniéndolo en  perspectiva, micro invertir es una formula sencilla para obtener un ahorro extra que nos puede venir muy bien en el futuro para hacer frente a algún gastos inesperado o proyecto. 

Ganancias = Impuestos

La micro inversión pone implica ganancias reales en los mercados financieros, y cada vez que obtenemos una ganancia tendremos que pasar por caja y pagar impuestos. Se pagan impuestos tanto por los intereses, como por los dividendos o las ganancias de capital.

Todo lo relacionado con los impuestos puede dar un poco de miedo al principio, pero no dejes que te impida invertir ya que todo suele ser más sencillo de lo que parece, además invirtiendo en fondos o a través de una plataforma regulada la mayor parte de nuestros compromisos con Hacienda se realizaran de forma automática (retenciones, dividendos, reembolsos…)

Lo mejor con respecto  a los impuestos es intentar pagarlos cuanto más tarde mejor y utilizar la reinversión para obtener mayores rentabilidades sin tener que pagarlos. Los ETF y los fondos de inversión ya actúan de esta manera, reinvirtiendo las ganancias obtenidas para no tener que hacer frente a ningún impuesto hasta que no vendemos definitivamente (siempre que el fondo sea de “Acumulación” no de “Distribución”). Así que es importante valorar cuando necesitamos realmente el dinero, y si podemos dejar correr las ganancias el mayor tiempo posible.

Además, la gran ventaja de los fondos de inversion que nos permiten hacer traspasos entre unos y otros, y a diferencia de los ETF no tendremos que pasar por caja cuando queremos cambiar de producto.

Ahorro=Objetivos

La gestión del ahorro funciona mejor cuando tienes un objetivo financiero específico en mente. Intentar asociar un objetivo a nuestra cuenta de inversión es una formula fácil para ser conscientes de que cada aportación cuenta.

Abrir una cuenta de micro inversión es una forma inteligente de comenzar a invertir sin tener que poner demasiado en juego. Aunque una cuenta de micro inversión no es un remedio que nos proporcionará grandes cambios en nuestra vida, es una forma estupenda de alcanzar un objetivo financiero concreto y aprender más sobre la importancia de la inversión.

Tu seguridad es lo primero

Nuestra prioridad es que estés seguro. Por ello, tus datos están encriptados y jamás los utilizaremos para fines no autorizados. Además, cumplimos con el último reglamento de la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD).